La parafina es una de esas cosas que todos los surfista conocen, pero pocos se preguntan de donde viene. Este bloquecito de cera transformo la manera en la que surfeamos hoy en día, dándonos el agarre necesario para hacer maniobras en la ola con confianza. Es por esto que vamos a explicar un poco de donde sale y como usarla.
Historia de la parafina en el surf
Como mencionamos en la anterior nota, el surf como lo conocemos hoy no siempre contó con la parafina. Antes de que se inventara, mantenerse de pie en la tabla era algo complicado. Fue por esto que en California, alrededor de la década de 1930, despues de varios intentos fallidos para mejorar el agarre de la tabla, algunos surfistas empezaron a ponerle cera de vela a sus tablas, en un intento de mejorar el agarre. Aunque rudimentario, esto dio resultados, y poco a poco la idea se fue popularizando.
La parafina, un subproducto del petróleo, demostró ser la solución perfecta a este problema. A medida que el surf evoluciono en las décadas posteriores, especialmente en los años 60 y 70, la parafina paso a ser algo indispensable. Las empresas empezaron a desarrollar versiones específicas para el surf, ajustando la fórmula para diferentes temperaturas y condiciones climáticas.
¿Para qué sirve la parafina?
El propósito principal de la parafina es evitar que te resbales, algo casi indispensable ya que la superficie de las tablas al estar hechas de fibra de vidrio se vuelven muy resbaladiza al mojarse. La parafina lo que hace es crear una capa texturizada que mejora el agarre y permite un mejor control de la tabla tanto al remar como al realizar maniobras.
Además de proporcionar tracción, la parafina actúa como una barrera protectora entre el surfista y la tabla, protegiendo la superficie de arañazos, golpes y otros desgastes menores.
¿Cómo aplicar la parafina correctamente?
Saber aplicar la parafina es importate para poder aprovechar al maximo su función. Pero como se hace esto?
- Limpia tu tabla: Antes de aplicar nueva parafina, asegurate de que la tabla esté limpia. Si hay restos de parafina vieja, usa un peine para rasparla para dejar la superficie lista.
- Aplica una capa base: En zonas de agua fría, es recomendable aplicar primero una capa base de parafina dura. Esta base ayuda a crear una estructura sólida para la parafina más suave. Lo ideal es hacerlo en movimientos circulares o en forma de cruz sobre el área donde van a estar tus pies en la tabla.
- Capa final: Después de la capa base, aplica la parafina adecuada para la temperatura del agua donde surfeas. Asegurate de cubrir bien toda la zona donde apoyan los pies y de crear grumos (bumps) para mejorar el agarre.
- Mantenimiento: Revisa tu tabla antes de cada sesión y renova la capa de parafina si ves que ha perdido su agarre.
El uso del peine de parafina
El peine de parafina es una herramienta bastante basica pero efectiva que todo surfista debería tener a mano. Tiene dos usos principales:
Raspar parafina vieja: Con el tiempo, la parafina se desgasta o acumula suciedad. El peine te permite sacar la parafina vieja de manera rápida y facil.
Reactivar la parafina: El lado con dientes del peine sirve para raspar la superficie de la parafina y "reactivarla", para aumentan el agarre.
Tipos de parafina según la temperatura del agua
Es importante elegir la parafina correcta según la temperatura del agua donde vas a surfear. Existen diferentes tipos de parafina, cada una diseñada para funcionar mejor en ciertas condiciones:
Aguas frías (menos de 15°C): La parafina para aguas frías es más blanda o suave, lo que permite que se mantenga pegajosa hasta en temperaturas bajas.
Aguas templadas (entre 15°C y 20°C): Esta parafina es de consistencia media y está diseñada para ofrecer un buen equilibrio entre tracción y durabilidad en climas moderados.
Aguas cálidas (más de 20°C): En climas cálidos, la parafina debe ser más dura para evitar que se derrita con el calor.
¿Cómo quitar la parafina de la tabla?
Con el tiempo, es necesario quitar la parafina vieja para aplicar una nueva capa. Cómo se hace esto?
Calenta la tabla: Deja tu tabla al sol por unos minutos para que la parafina se ablande. No te excedas, ya que el calor puede dañar la tabla. En invierno cuando el sol no es lo suficientemente fuerte se puede usar un secador de pelo o agua caliente.
Raspa con el peine: Usa el lado plano del peine de parafina para raspar la parafina. Hacelo en movimientos largos para retirar la mayor cantidad posible.
Limpia los restos: Usa un paño o papel de cocina para sacar los restos de parafina que quedaron. Si la parafina está muy pegajosa, puedes utilizar un poco de alcohol o un solvente natural, como aceite de coco, para limpiar la superficie por completo.